23 de agosto de 2008

*** MI DERECHO A LA PATALETA ***


Estoy muy cansado y deprimido. Llevo tanto tiempo inactivo... mermado en mis facultades que nadie, viéndome en este momento creería que fui, no hace tanto tiempo, maestro, que fui capaz de enseñar miles de cosas y disfrutar plenamente de cada momento de mi vida.
Son muchos años de tratamiento, 18, aunque lo he llevado bastante bien, ahora ya no es igual.
Constantemente mis ojos irritados, llorosos, tristes, me delatan. Influye en mi calidad de vida. He de inventar estúpidas mentiras para justificar mi cambio de carácter y de vida, mi tendencia a la soledad, a evitar a los amigos, las preguntas, la comunicación...
Es dolor psicológico, si, pero también dolor físico: Mirar simplemente, la TV, leer, escribir... conlleva tener que descansar la mirada a cada minuto..
Ya sé que hablar así es simple e infantil; discúlpenme por ello, quizá más que infantil sea humano.
Se que nada puedo hacer, solamente obedecer a mi maravilloso doctor, al que agradezco infinitamente las atenciones que me brinda cada vez que tengo que visitarlo y seguir sus consejos.
Tengo que adaptarme a mis limitaciones, lo se, pero es muy difícil para una persona tan activo como soy... o como era.
Tan solo me queda ejercer mi derecho a la pataleta, como la de hoy, que me alivia por un tiempo.
Aunque me queda el consuelo de pensar que hay muchas personas en peores condiciones que yo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Well, all I can say is. Im hungry.