8 de julio de 2010

¿POR QUÉ LAS MUJERES HABLAN TANTO?


Una encuesta realizada en Estados Unidos mostró que los hombres usan de media, unas 1.500 palabras por día, mientras que las mujeres usan un mínimo de 3.000 (justo el doble).
En el congreso en el que fue presentado este estudio, una mujer se levantó y dijo:
"Es lógico que las mujeres hablemos el doble que los hombres. Nosotras tenemos que repetir todo lo que decimos para que los hombres nos entiendan."
Y el moderador (hombre) preguntó:
- "¿Cómo dice?"

-Pues eso...

LAS MUJERES DE MI GENERACIÓN SOMOS LAS MEJORES.

Palabras de Santiago Gamboa, escritor colombiano.


Las mujeres de mi generación son las mejores. Y punto.
Hoy tienen cuarenta y pico, incluso cincuenta y pico, algunas más... y son bellas, muy bellas, pero también serenas, comprensivas, sensatas, y sobre todo, endiabladamente seductoras, esto a pesar de sus incipientes patas de gallo o de esa afectuosa celulitis que capitanea sus muslos, pero que las hace tan humanas, tan reales. Hermosamente reales.
Casi todas, hoy, están casadas o divorciadas, o divorciadas y vueltas a casar, con la idea de no equivocarse en el segundo intento, que a veces es un modo de acercarse al tercero, y al cuarto intento. Qué importa…
Otras, aunque pocas, mantienen una pertinaz soltería y la protegen como ciudad sitiada que, de cualquier modo, cada tanto abre sus puertas a algún visitante.
Nacidas bajo la era de Acuario, con el influjo de la música de Los Beatles, de Bob Dylan…. Herederas de la “revolución sexual” de la década de los 60 y de las corrientes feministas, otras con resabios de esas épocas.... que, sin embargo recibieron pasadas por varios filtros, ellas supieron combinar libertad con coquetería, emancipación con pasión, reivindicación con seducción.
Jamás vieron en el hombre a un enemigo a pesar que le cantaron unas cuantas verdades!, pues comprendieron que emanciparse era algo más que poner al hombre a trapear el baño o a cambiar el rollo de papel higiénico cuando éste, trágicamente, se acaba, y decidieron pactar para vivir en pareja.
Son maravillosas y tienen estilo, aún cuando nos hacen sufrir, cuando nos engañan o nos dejan. Usaron faldas hindúes a los 18 años, se cubrieron con suéter de lana y perdieron su parecido con María, la virgen, en una noche loca de viernes o sábado después de bailar.
Hablaron con pasión de política y quisieron cambiar el mundo.
Aquí hay algunas razones de por qué una mujer de más de 40 nunca te va a despertar en la mitad de la noche para preguntarte…. “Qué estás pensando?” No le interesa lo que estás pensando!!!
Si una mujer de más de 40 no quiere mirar un partido de fútbol, ella no da vueltas alrededor tuyo. Se pone a hacer algo que ella quiere hacer y generalmente es algo mucho más interesante. Una mujer de más de 40, se conoce lo suficiente como para estar segura de sí misma, de lo que quiere, y de con quién lo quiere.
Son muy pocas las mujeres de más de 40 a las que les importa lo que tú pienses de lo que ella hace. Una mujer de más de 40, tiene cubierta su cuota de relaciones “importantes” y “compromisos”. Lo último que quiere en su vida es otro amante posesivo.
Las mujeres de más de 40 son generalmente generosas en alabanzas. Ellas saben lo que es no ser apreciadas lo suficiente. Tienen suficiente seguridad en sí mismas como para presentarte a sus amigas. Solo una mujer más joven e inmadura puede llegar a ignorar a su mejor amiga.
Las mujeres se vuelven psíquicas a medida que pasa el tiempo. No necesitas confesar tus pecados, ellas siempre lo saben. Son honestas y directas. Te dicen directamente que eres un imbécil si es lo que sienten sobre ti.
Tenemos muchas cosas buenas que decir de las mujeres de más de 40 y por múltiples razones.
Lamentablemente no es recíproco.
Por cada impactante mujer de más de 40,50, 60 inteligente, divertida y sexy hay un hombre con casi o más de 50… pelado, gordo, barrigón y con pantalones arrugados haciéndose el gracioso con una chica de 20 años.

¡Señoras….. les pido perdón por ello….!!!

BEBÉ MAÑO. (Sin ánimo de ofender, yo soy maña también)


Un maño está bebiendo en un bar de Zaragoza cuando recibe una llamada en su móvil. Descuelga, sonríe de oreja a oreja y ordena una ronda de Ambar para todo el mundo en el bar porque ─anuncia─ su mujer ha tenido un típico bebé maño con un peso al nacer de 11 kilos.
Nadie puede creer que un recién nacido pueda pesar 11 kilos, pero el maño se encoge de hombros. "La media en Aragón, tíos. Como dije, el zagal es un típico aragonés".
Las felicitaciones le llueven de todos los que están cerca y se oyen muchas exclamaciones de "GUAU". Una mujer incluso se desmaya debido a dolores empáticos.
Dos semanas más tarde, el maño vuelve al bar.
El camarero dice: "Usted es el padre del típico bebé aragones que pesó 11 kilos al nacer, ¿no? Todo el mundo ha estado haciendo apuestas sobre cuán grande sería en dos semanas. Le íbamos a llamar... así que, ¿cuanto pesa ahora?"
El orgulloso padre responde: "ocho kilos".
El camarero está confuso y preocupado. "¿Qué ha sucedido? El bebé ya pesaba 11 kilos el día que nació".
El padre maño se toma pausadamente un sorbo de su botellín de Ambar , se seca los labios en la manga, se inclina hacia el camarero y orgullosamente le dice...
"Limos operao de fimosis"

LA FABULA DEL PUERCOESPIN


Durante la era glacial, muchos animales morían por causa del frío.


Los puerco-espines, percibiendo la situación, resolvieron juntarse en grupos, así se abrigaban y se protegían mutuamente, más las espinas de cada uno herían a los compañeros más próximos, justamente los que ofrecían más calor.


Por eso decidieron alejarse unos de otros y comenzaron de nuevo a morir congelados.
Entonces precisaron hacer una elección: o desaparecían de la Tierra o aceptaban las espinas de los compañeros.



Con sabiduría, decidieron volver a estar juntos.
Aprendieron así a convivir con las pequeñas heridas que la relación con un semejante muy próximo puede causar, ya que lo más importante era el calor del otro.
Y así sobrevivieron.



Moraleja: La mejor relación no es aquella que une personas perfectas, más aquella donde cada uno aprende a convivir con los defectos del otro, y admirar sus cualidades.

CONSEJOS PARA MANTENER LA SALUD, JE, JE... y JE.

Para Adultos Contemporáneos seudo-intelecto-neuro-hipocondríacos...
Es decir: nosotros...

Dicen que todos los días tenemos que comer una manzana por el hierro y un plátano, por el potasio. También una naranja, para la vitamina C, medio melón para mejorar la digestión y una taza de té verde sin azúcar, para prevenir la diabetes.
Todos los días hay que tomar dos litros de agua (sí, y luego mearlos, que lleva como el doble del tiempo que llevó tomárselos).
Todos los días hay que tomarse un Activia o un Yogurt para tener 'L.Cassei Defensis', que nadie sabe qué mierda es, pero parece que si no te tomas un millón y medio todos los días, empiezas a ver a la gente como borrosa.
Cada día una aspirina, para prevenir los infartos, más un vaso de vino tinto, para lo mismo. Y otro de blanco, para el sistema nervioso. Y uno de cerveza, que ya no me acuerdo para qué era. Si te lo tomas todo
junto, por más que te dé un derrame ahí mismo, no te preocupes pues probablemente ni te enteres.
Todos los días hay que comer fibra. Mucha, muchísima fibra, hasta que logres defecar un sweater. Hay que hacer entre cuatro y seis comidas diarias, livianas, sin olvidarte de masticar cien veces cada bocado.
Haciendo un pequeño cálculo, sólo en comer se te van como cinco horitas.
Ah, después de cada comida hay que lavarse los dientes, o sea: después del Activia y la fibra los dientes, después de la manzana los dientes, después del plátano los dientes... y así mientras tengas dientes, sin olvidar pasarte el hilo dental, masajeador de encías, enjuague con colurtorio...
Mejor amplía el baño y mete el equipo de música, porque entre el agua, la fibra y los dientes, te vas a pasar varias horas por día ahí adentro.
Hay que dormir ocho horas y trabajar otras ocho, más las cinco que empleamos en comer, veintiuno.. Te quedan tres, siempre que no te agarre algún imprevisto. Según las estadísticas, vemos tres horas diarias de televisión. Bueno, ya no puedes porque todos los días hay que caminar por lo menos media hora (dato por experiencia: a los 15minutos regresa, si no la media hora se te hace una).
Y hay que cuidar las amistades porque son como una planta: hay que regarlas a diario. Y cuando te vas de vacaciones también, supongo. Además, hay que estar bien informado, así que hay que leer por lo menos dos diarios y algún artículo de revista, para contrastar la información. ¡Ah!, hay que tener sexo todos los días, pero sin caer en la rutina: hay que ser innovador, creativo, renovar la seducción. Eso lleva su tiempo. ¡Y ni qué hablar si es sexo tántrico!! (al respecto te recuerdo: después de cada comida hay que cepillarse los dientes!).
También hay que hacer tiempo para barrer, lavar la ropa, los platos, y no te digo si tienes perro u otra mascota... ¿hijos?!
En fin, a mí la cuenta me da unas 29 horas diarias. La única posibilidad que se me ocurre es hacer varias de estas cosas a la vez, por ejemplo: Te duchas con agua fría y con la boca abierta así te tragas los 2 litros de agua. Mientras sales del baño con el cepillo de dientes en la boca le vas haciendo el amor (tántrico) parado a tu pareja, que de paso mira la TV y te cuenta, mientras barres. ¿Te quedó una mano libre? Llama a tus amigos.. ¡Y a tus padres!! Tómate el vino (después de llamar a tus padres te va a hacer falta). El Yakult con la manzana te lo puede dar tu pareja mientras se come el plátano con el Activia.
Y menos mal que ya crecimos, porque si no nos tendríamos queclavar un Danonino Extra Calcio todos los días.
¡Úuuuf! Pero si te quedan 2 minutos, copia esto en un mensaje y envíalo a los amigos (que hay que regar como las plantas) mientras tomas una cucharadita de All Bran, que hace muy bien... Y ahora te dejo porque entre el yogur, el medio melón, la cerveza, el primer litro de agua y la tercera comida con fibra del día, ya no sé qué estoy haciendo pero necesito un baño urgente. ¡Ah!, voy a aprovechar y me llevo el cepillo de dientes...


SI YA PUBLIQUÉ ESTO ANTES, PERDONA... ES EL ALZHEIMER QUE A PESAR DE
TANTOS CUIDADOS NO LO HE PODIDO COMBATIR